Las entidades a cargo se preparan para seguir registrando el estado de la oferta natural de bosque en el país con todas las medidas de bioseguridad. A la fecha, se ha logrado un avance del 29% de la implementación en la Amazonía colombiana.
Noticia publicada por Visión Amazonía.
De acuerdo con las cifras oficiales del Sistema de Monitoreo de Bosques del Ideam, Colombia cuenta con una extensión de bosques naturales de 59,8 millones de hectáreas. No obstante, si se quiere conocer a profundidad la composición, estructura o diversidad florística de estas áreas, la información disponible para el país no es lo suficientemente robusta ni actualizada para servir como hoja de ruta en el diseño de las grandes estrategias futuras que estos territorios necesitan en aras de evaluar los efectos de las dinámicas naturales, el cambio climático, la deforestación y la degradación, y en el suministro de bienes y servicios ecosistémicos, entre muchas otras preocupaciones al orden del día.
Aunque diversos institutos de investigación, universidades, Corporaciones Autónomas Regionales, fundaciones y autoridades de tipo ambiental se han dedicado durante décadas a recopilar información de carácter científico sobre el estado del bosque (avance de la deforestación, valor funcional de las especies allí localizadas o contenidos de carbono en áreas en particular, etc.), la falta de un gran inventario nacional es una tarea pendiente que tiene el país.
No obstante, es una misión en la que desde el año 2015 están trabajando importantes actores ambientales del orden nacional.
Conocer la oferta natural de bosque
Desde el año 2017, el Programa Visión Amazonía se propuso contribuir a la implementación del Inventario Forestal Nacional (IFN) en la Amazonía colombiana, sumándose como aliado de los grandes impulsores de esta herramienta: el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS) y el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam), y su implementación se realiza a través del trabajo coordinado con el Instituto SINCHI, el Instituto Alexander von Humboldt y la Universidad Nacional de Colombia (sede Medellín).
“El Inventario Forestal Nacional nos permitirá conocer detalladamente la oferta natural de bosque en Colombia. Podremos identificar cuál es la estructura, composición y diversidad florística, carbono almacenado, los detritos de madera, volumen de madera, y cuál es la dinámica de los bosques del país, para así centrar nuestros esfuerzos de conservación con base la identificación de amenazas locales o internacionales, por ejemplo”, explica Edersson Cabrera, líder del Pilar 5 ‘Condiciones Habilitantes’ del Programa Visión Amazonía.
La ruta de la deforestación, al detalle
De acuerdo con Cabrera, la información compilada por el IFN también permitirá identificar los impactos reales de la deforestación y la degradación forestal -así como de los efectos del cambio climático- en las estructuras de bosque natural, con el análisis de diferentes variables que van desde la altura y el diámetro de los árboles hasta los contenidos reales de carbono que se están almacenando en estas estructuras.
“Estudios preliminares que hemos realizado junto al Ideam, con apoyo decidido de Visión Amazonía, señalan que hay un patrón de reducción ostensible del almacenamiento de carbono en las áreas de bosque con mayor presencia humana en la Amazonía colombiana. Esto es solo uno de los datos que el Inventario Forestal Nacional nos permitirá confirmar”, afirma el líder del Pilar 5 ‘Condiciones Habilitantes’ del Programa Visión Amazonía.
En la misma línea, el IFN permitirá a las autoridades ambientales colombianas contar con el conocimiento que requieren para crear estrategias de conservación -como las que realiza el Programa Visión Amazonía- que promueven la conservación y uso sostenible del bosque.
“A través del análisis de lo que se denomina “mortalidad y reclutamiento” se podrá identificar la capacidad del bosque para mantener los individuos arbóreos juveniles, es decir, entender de mejor forma cómo funciona la regeneración natural y la diversidad vegetal del bosque. De tal manera que será posible saber si un área de bosque podría estar afectada significativamente por la tala selectiva en la composición y diversidad de especies arbóreas presentes en dichos ecosistemas, lo cual será posible a partir del segundo ciclo de implementación del inventario”, afirma Edersson Cabrera.
¿Qué método utiliza el IFN?
Dado que resulta prácticamente imposible analizar cada hectárea de bosque en Colombia con la profundidad que se propone este inventario, el IFN sigue un marco geoestadístico diseñado por el Grupo de Bosques de la Subdirección de Ecosistemas del Ideam.
A grandes rasgos, el IFN establece en el país unas 1.924 unidades de muestreo (el 70% está comprendido por áreas de bosque) también llamadas “conglomerados”. Para facilitar el levantamiento de información, el equipo que adelanta el inventario forestal divide estos conglomerados en cinco subparcelas que permiten obtener información de los árboles pequeños (brinzales), juveniles (latizales) y adultos (fustales) del bosque. Para el caso de la Amazonía colombiana, se levantarán un total de 596 conglomerados.
“Con los datos que se recolectan en esas cinco subparcelas, podemos tener una idea clara y concreta de cuál es el estado de ese bosque natural que está presente en dicha localización precisa. Una vez concluida esta etapa, se realiza la sumatoria de los indicadores observados en los 596 conglomerados, para luego poder analizar (con muy buenos niveles de incertidumbre) los resultados hallados durante todo el proceso de esta robusta estadística”, precisa el vocero del Programa Visión Amazonía.
¿Cuál es la situación actual del IFN?
Durante gran parte del 2020, el personal encargado de la recolección de información del IFN no pudo visitar los bosques de la Amazonía y del país por cuenta de la emergencia sanitaria suscitada por la pandemia de covid-19.
Sin embargo, en las próximas semanas se reiniciarán las labores en campo, pues las entidades que lideran esta herramienta ya cuentan con el aval del Ministerio de Salud y Protección Social para levantar información con las respectivas medidas de bioseguridad, con miras a garantizar la salud tanto del personal especializado como de las comunidades que habitan en los bosques.
A nivel nacional, el Inventario Forestal Nacional ya ha examinado el 21% de las estructuras de bosque natural; así mismo, en la región amazónica se ha logrado un avance cercano al 29%.
“Gracias a las organizaciones internacionales que financian este programa, ya contamos con los recursos necesarios para hacer el inventario del 100% de las parcelas de bosque en la Amazonía colombiana. Esperamos dar por finalizado el IFN antes del cierre del año 2022”, puntualiza Edersson Cabrera.
Finalmente, es importante mencionar que el Ideam, como la autoridad nacional en esta materia, publicará reportes oficiales que le permitirán al país conocer los principales resultados de este importante proyecto conforme avance su implementación, para así tener un primer acercamiento de la oferta de bosque natural en Colombia. La publicación de resultados del IFN seguirá las políticas de tratamiento de datos que la entidad determine.
